No te pases


No te pases

La obra de teatro “5Hombres.com” fue un éxito. Estuvimos dos años en el Teatro Victoria de Barcelona, y dos años luchamos contra el mismo problema: el tiempo.

Cinco monólogos, cinco monologuistas, cada uno capaz de interactuar con el público e improvisar. ¡Cómo disfrutábamos! ¡Cómo disfrutaba el público! ¡Cómo se enfadaba la directora! Cada día la función duraba más, y ella nos decía “El tiempo ideal para el teatro es una hora y cuarto. El público está acostumbrado a esa hora y cuarto. Cuando te pasas, aunque disfruten, están inquietos”.

Tenía razón. Uno de los reclamos de nuestra compañía era el gran Santi Millán. Muchos, y sobre todo muchas, venían expresamente para ver a SU Santi. Naturalmente, como es el más mediático, salía el último y yo, que salía el primero, pude observar que los días en que nos pasamos de tiempo y Santi salía a escena más allá de los 75 minutos de rigor, la cosa bajaba. El público disfrutaba, cómo no; Santi bordaba su sección, pero el entusiasmo de otros días no hacía acto de presencia. Nuestro público estaba algo cansado.

En las novelas pasa algo similar. Si publicas con una editorial, te controlarán este tema. Entre otras cosas, porque: doble de páginas, doble de papel, doble de tinta, extra de almacenaje, de transporte y de precio de venta, encarece el producto final. Tu editor te obligará a recortar, o directamente te comunicará que no se puede publicar así. Aunque vayas directo a ebook y la longitud de la obra no repercuta de la misma forma en el coste, afectará al lector. Si tu obra es el doble de extensa de lo que le tocaría, por muy buena que sea, algunos lectores opinarán: “está bien pero se me hizo un poco pesada”.

Siempre hay excepciones, evidentemente; no hay que mutilar una obra de arte porque contenga muchas más palabras de las que suelen tener las de su género; pero son la excepción.

Investiga. ¿Cuántas palabras suele tener una novela del género al que pertenece? ¿Cuántas palabras contiene, de momento, tu proyecto? A nuestros suscritores les enviaremos una lista de novelas famosas y su longitud en palabras para que puedan comparar.

7 comentarios :

  1. Es verdad, concuerdo completamente, a mí me ha pasado con novelas que, inútilmente, las alargan y cuando ya parece que va a ir todo bien, vuelven a guardar un secreto, vuelve a escaparse el asesino o lo que sea que haga que se alargue 20 hojas más... En películas y series con mayor razón (por eso no veo mucho).
    Mis novelas no son muy largas, por el género al que pertenecen, si pierde el entusiasmo, hasta a mí se me hace tedioso seguir escribiendo.
    Espero esa lista :D

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  2. Me parece un pensamiento más que perfecto. La verdad es que las obras que ocupan mucha extensión, o son muy buenas, o la gente las rechaza por ver tantas páginas para leer. Es por ello que muchos escritores acaban perdiendo esa descripción excepcional que se tenía antiguamente para acabar escribiendo una obra con mucha acción y desarrollo, pero pocos detalles. A mí me gusta poner como ejemplo "El Señor de los Anillos" de J.R.R. Tolkien, una obra que sobrepasa las 1000 páginas y para los que no la cojan con verdadera devoción, se puede hacer pesada con tanto dato mitológico que en el momento no vienen a cuento (he de decir que a mí esa novela me encanta). En un mundo donde actualmente hay tantas personas que se lanzan a la aventura literaria, es más fácil hacer llegar a la gente una novela corta e intensa, que una larga, intensa y descriptiva.

    Espero no haberme liado mucho XD
    Yo también espero la lista ^-^

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  3. si me gusta un libro no quiero que acabe. yo lo que haria seria si es demasiado larga pues lo divido y toma trilogia ja ja

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  4. Yo creo que esto pasa con la mayoría de libros largos, los llamados "tochos". Siempre sobra algo, según mi experiencia.

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  5. Yo las prefiero cortas, con lo justo para contar la historia y no rellenar páginas con recordatorios al lector para que n se pierda. De hecho, mi novela es por ahí por donde está recibiendo las mejores críticas, los lectores me dicen que les ha dado mucha pena que se acabara y que ellos hubiesen preferido que pasara esto o aquello, muy bien les digo yo; pues eso es lo que quería conseguir vez de aburrirles con páginas de sobra.

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  6. Debo de pecar por lo contrario, ya que mis últimos libros escritos tienen menos palabras que las novelas que me gusta leer, aunque sean del mismo género. Agregar palabras para hacerla más larga me parece poco adecuado, y el leer un artículo en Lecturalia en donde hablaban de cómo afectan la cantidad de palabras al éxito del libro en cuestión no me tranquilizó.

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